Ideas para gastar menos en la compra del super
Cuando dependemos de un presupuesto, cada céntimo puede ser importante. En tiempos de crisis es importante estirar el dinero, sin embargo todos necesitamos comer para sobrevivir y disfrutar de la vida.
Obviamente, una buena comida no tiene por qué ser caviar, con champán y productos gourmet; si los alimentos son frescos y sabrosos pueden añadir placer al presupuesto más ajustado. Comprar frutas y verduras de temporada no solo resulta mas sano, sino supone un ahorro. También podemos reducir el gasto de la compra con otros trucos:
Evitar la compra de salsas y aliños. Con una base de hierbas frescas, aceite de oliva, vinagre, yogur, limón.... se pueden hacer todo tipo de aliños sabrosos y salen mucho mas baratos
Visitar la carnicería, pescadería o supermercado a última hora, especialmente los sábados. Tal vez no encuentre el tipo de pescado o corte de carne que más le gusta, pero es un buen momento para experimentar con nuevos ingredientes y muchas tiendas rebajan los precios de sus productos perecederos antes de cerrar
Comprar al por mayor los alimentos no perecederos, como el tomate en lata, el aceite, le vinagre y la pasta
Aprovechar las ofertas. Por ejemplo, si vemos una caja de tomates muy barata, lo mejor es comprarla y preparar varios botes de salsa de tomate que podemos congelar para utilizar más adelante
Aprender a aprovechar las sobras para hacer sopas, risottos, salsas para pasta... Tirar la comida es tirar el dinero
Aprovechar todas las partes que se pueda de los alimentos. Los huesos y carcasa de un pollo asado sirven como la base de un caldo de pollo. Si los hervimos en agua con un par de cebollas, zanahorias, apio y limón tenemos un caldo que nos sirve para hacer un arroz el día siguiente, un risotto, un guiso o una sopa
Cultivar algunas hierbas y vegetales en el jardín o en macetas; se obtienen alimentos frescos y sabrosos prácticamente con coste cero
Comprar productos de las líneas blancas en lugar de los de marcas conocidas y mirar varios sitios antes de comprar
Buscar tiendas y estantes con ofertas. Se suelen encontrar alimentos en perfecto estado pero que están cerca de la fecha de caducidad, por lo que quieren venderlos cuanto antes. Mientras utilicemos el producto pronto, no notaremos la diferencia entre el de oferta y el que no lo está. En algunos casos la fecha de caducidad puede ser en realidad orientativa
Elegir recetas baratas para comer entre semana para compensar recetas mas caras los fines de semana cuando en realidad se disfruta de la comida con mas sosiego y tranquilidad.
Planifica tus menús y haz una lista con los alimentos realmente necesarios. Si vas a adquirir algún extra, cógelo lo primero y luego céntrate en tu listado.
Compara precios y aprovecha las ofertas de productos no perecederos. Así tendrás un buen fondo de despensa sin gastar en exceso.
Consume alimentos frescos de temporada. Se encuentran en su momento óptimo y son más económicos. Apuesta por la calidad a buen precio. El pescado azul tiene excelentes cualidades nutritivas y no cuesta mucho.
Cuidado con la carne ya fileteada o despiezada. Suele ser más cara que adquirir la pieza entera.
Haz la compra con el estómago lleno, para evitar tentaciones, y sin compañía (los niños suelen ser caprichosos).
Elabora una lista. Programa los menús teniendo en cuenta el número de comensales y sus gustos, y calcula un presupuesto. No compres de más. Ten en cuenta que, por ejemplo, la comida de Año Nuevo -si se ha trasnochado mucho- no es tan copiosa. Una idea: una crema de marisco -elaborada con antelación y congelada-, unos canapés, ensaladas de cuarta gama (listas para consumir) y un sorbete de cava con helado de limón te pueden sacar del apuro.
Haz espacio en el congelador. A primeros de diciembre habrá que ir descongelando (y consumiendo) los alimentos allí conservados para dar entrada a los que vamos a cocinar en las fiestas. Ya se sabe que según se aproximan esas fechas los precios suben. Mejor comprar todo lo que puedas con adelanto.
¿Qué puedes congelar? Verduras, carnes y pescados (también algunos caldos y salsas) responden a esta pregunta. Para congelar las verduras primero debes escaldarlas, unos dos minutos en agua hirviendo con unas gotitas de limón para que no pierdan su color. Luego, se introducen en bolsas para congelar. El pescado se debe escamar, hay que quitarle la cabeza, destriparlo, lavarlo, secarlo y envolverlo en film transparente. En las carnes hay que eliminar el exceso de grasa y, si se quiere, deshuesarlas. Es conveniente hacerlas porciones y envolverlas en film. Y recuerda: no se pueden congelar los huevos, la pasta ni el arroz.
Comprar con cabeza... y también online. Para no salirte del presupuesto conviene tener en cuenta que muchos productos (sobre todo bebidas: cavas, vinos,licores...) se pueden adquirir a través de Internet a un precio más bajo. Y si no quieres comprar online, la Red sí te servirá para darte pistas y establecer comparaciones de precios en distintos establecimientos.
Pon las manos en la masa. Para aligerar gastos puedes preparar en casa algunos de los dulces navideños: mantecados, turrón, brazos de gitano... Aprovecha las recetas de los originales postres que te ofrecemos en este número.
Forma un equipo. Con ayuda todo sale mejor. Si tienes hijos (y/o pareja), implícalos en las tareas; que te echen una mano en la compra, en la preparación de canapés, aperitivos y bandejas de dulces y también en la decoración de la mesa.
Cuando dependemos de un presupuesto, cada céntimo puede ser importante. En tiempos de crisis es importante estirar el dinero, sin embargo todos necesitamos comer para sobrevivir y disfrutar de la vida.
Obviamente, una buena comida no tiene por qué ser caviar, con champán y productos gourmet; si los alimentos son frescos y sabrosos pueden añadir placer al presupuesto más ajustado. Comprar frutas y verduras de temporada no solo resulta mas sano, sino supone un ahorro. También podemos reducir el gasto de la compra con otros trucos:
Evitar la compra de salsas y aliños. Con una base de hierbas frescas, aceite de oliva, vinagre, yogur, limón.... se pueden hacer todo tipo de aliños sabrosos y salen mucho mas baratos
Visitar la carnicería, pescadería o supermercado a última hora, especialmente los sábados. Tal vez no encuentre el tipo de pescado o corte de carne que más le gusta, pero es un buen momento para experimentar con nuevos ingredientes y muchas tiendas rebajan los precios de sus productos perecederos antes de cerrar
Comprar al por mayor los alimentos no perecederos, como el tomate en lata, el aceite, le vinagre y la pasta
Aprovechar las ofertas. Por ejemplo, si vemos una caja de tomates muy barata, lo mejor es comprarla y preparar varios botes de salsa de tomate que podemos congelar para utilizar más adelante
Aprender a aprovechar las sobras para hacer sopas, risottos, salsas para pasta... Tirar la comida es tirar el dinero
Aprovechar todas las partes que se pueda de los alimentos. Los huesos y carcasa de un pollo asado sirven como la base de un caldo de pollo. Si los hervimos en agua con un par de cebollas, zanahorias, apio y limón tenemos un caldo que nos sirve para hacer un arroz el día siguiente, un risotto, un guiso o una sopa
Cultivar algunas hierbas y vegetales en el jardín o en macetas; se obtienen alimentos frescos y sabrosos prácticamente con coste cero
Comprar productos de las líneas blancas en lugar de los de marcas conocidas y mirar varios sitios antes de comprar
Buscar tiendas y estantes con ofertas. Se suelen encontrar alimentos en perfecto estado pero que están cerca de la fecha de caducidad, por lo que quieren venderlos cuanto antes. Mientras utilicemos el producto pronto, no notaremos la diferencia entre el de oferta y el que no lo está. En algunos casos la fecha de caducidad puede ser en realidad orientativa
Elegir recetas baratas para comer entre semana para compensar recetas mas caras los fines de semana cuando en realidad se disfruta de la comida con mas sosiego y tranquilidad.
Planifica tus menús y haz una lista con los alimentos realmente necesarios. Si vas a adquirir algún extra, cógelo lo primero y luego céntrate en tu listado.
Compara precios y aprovecha las ofertas de productos no perecederos. Así tendrás un buen fondo de despensa sin gastar en exceso.
Consume alimentos frescos de temporada. Se encuentran en su momento óptimo y son más económicos. Apuesta por la calidad a buen precio. El pescado azul tiene excelentes cualidades nutritivas y no cuesta mucho.
Cuidado con la carne ya fileteada o despiezada. Suele ser más cara que adquirir la pieza entera.
Haz la compra con el estómago lleno, para evitar tentaciones, y sin compañía (los niños suelen ser caprichosos).
Elabora una lista. Programa los menús teniendo en cuenta el número de comensales y sus gustos, y calcula un presupuesto. No compres de más. Ten en cuenta que, por ejemplo, la comida de Año Nuevo -si se ha trasnochado mucho- no es tan copiosa. Una idea: una crema de marisco -elaborada con antelación y congelada-, unos canapés, ensaladas de cuarta gama (listas para consumir) y un sorbete de cava con helado de limón te pueden sacar del apuro.
Haz espacio en el congelador. A primeros de diciembre habrá que ir descongelando (y consumiendo) los alimentos allí conservados para dar entrada a los que vamos a cocinar en las fiestas. Ya se sabe que según se aproximan esas fechas los precios suben. Mejor comprar todo lo que puedas con adelanto.
¿Qué puedes congelar? Verduras, carnes y pescados (también algunos caldos y salsas) responden a esta pregunta. Para congelar las verduras primero debes escaldarlas, unos dos minutos en agua hirviendo con unas gotitas de limón para que no pierdan su color. Luego, se introducen en bolsas para congelar. El pescado se debe escamar, hay que quitarle la cabeza, destriparlo, lavarlo, secarlo y envolverlo en film transparente. En las carnes hay que eliminar el exceso de grasa y, si se quiere, deshuesarlas. Es conveniente hacerlas porciones y envolverlas en film. Y recuerda: no se pueden congelar los huevos, la pasta ni el arroz.
Comprar con cabeza... y también online. Para no salirte del presupuesto conviene tener en cuenta que muchos productos (sobre todo bebidas: cavas, vinos,licores...) se pueden adquirir a través de Internet a un precio más bajo. Y si no quieres comprar online, la Red sí te servirá para darte pistas y establecer comparaciones de precios en distintos establecimientos.
Pon las manos en la masa. Para aligerar gastos puedes preparar en casa algunos de los dulces navideños: mantecados, turrón, brazos de gitano... Aprovecha las recetas de los originales postres que te ofrecemos en este número.
Forma un equipo. Con ayuda todo sale mejor. Si tienes hijos (y/o pareja), implícalos en las tareas; que te echen una mano en la compra, en la preparación de canapés, aperitivos y bandejas de dulces y también en la decoración de la mesa.
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